Llegan las fiestas, y con ello la alegría de envolver regalos a la gente que más queremos. Consumir responsablemente no es sólo consumir menos, sino consumir mejor. Pensar realmente qué queremos y si lo necesitamos, cuestionarnos si no podemos conseguirlo de otra manera, si hace falta comprarlo o se puede alquilar, si puede ser de segunda mano o si se puede reparar, si lo hace alguien de la zona, si lo hacen con inclusión social, si utilizan materiales reciclados y reciclables y después de hacernos esas preguntas, elegir a conciencia.
En esta época abusamos del uso bolsas y de papeles impresos y plásticos metalizados de muchos colores que duran un minuto en manos de quien abre el regalo y luego terminan en la basura, o con suerte en un contenedor de reciclables. Por eso, hoy te mostramos algunas alternativas mas amigables con el planeta para envolver los regalos. ¿Cuál vas a elegir?
TELAS
Puedes hacer mucho con una simple tela para sustituir el papel de regalo. Piensa en bufandas, pañuelos, seca manos, servilletas grandes, cualquier trozo de tela que tengas por casa, con una camiseta o incluso con calcetines de los divertidos.
Será un papel de regalo ecológico que además se podrá reutilizar, que muchos de nosotros tenemos por casa o de muy bajo coste si lo compramos. Si el trozo de tela es lo suficientemente grande, usa un nudo estilo furoshiki (El arte japonés tradicional que utiliza tela como envoltorio de regalos y objetos) para sujetarlo.
BOLSAS DE ALGODÓN ORGÁNICO
Otra propuesta original para envolver un regalo es utilizar bolsas de algodón orgánico. Son parecidas a las bolsas de plástico parecidas que vemos en los supermercados con las frutas y verduras.
Estas, no contienen poliéster ni nylon, no están blanqueadas como las típicas y son biodegradables. Además, se pueden lavar, reutilizar muchas veces y no producen residuos.
PERIÓDICOS Y REVISTAS
Otra forma de regenerar papel de regalo, es utilizar y reciclar el papel que tengamos en casa; desde periódicos viejos a esas revistas que siguen amontonándose en un rincón, mapas que quedan muy bien o incluso esos posters y láminas que ya es hora que los cambies. Posiblemente no sea la opción más original, pero sí el tipo de embalaje que todos tenemos por casa.
A simple vista, no parece la opción más ideal, pero con un pequeño arreglo terminará siendo un envoltorio bastante atractivo. Lo ideal es, después de empaquetarlo, atarlo con un cordel, celo o una cinta decorativa , es la opción perfecta y rápida.
LATAS Y FRASCOS DE VIDRIO
Volvemos a dar una segunda vida, sea el que ya tenemos en casa o el que podemos comprar, seguro que nos será útil después; para la cocina o almacenar algo. Es una buena alternativa al embalaje tradicional y no irá directamente al tacho de la basura.
SIN COMENTARIOS